La noche en la que The Brew iluminó a una ciudad de rock & roll


Los días pasan rápidamente y no queríamos dejar de contar el concierto al que asistimos el pasado jueves 21 de octubre. Los británicos The Brew recalaron en el Kafe Antzokia de Bilbao y me dejaron alucinado. No había oído nada de ellos pero me acerqué a verles en directo aconsejado por un amigo cuyo olfato musical pocas veces falla. Y tanto que no falló. Menudo power trío! Si el blues-rock busca representante, ya tiene a sus mejores embajadores. Desde el primer trallazo hasta el último, The Brew ponen sobre la mesa todas sus cartas. Sus influencias claramente de los 60-70 no las ocultan. Desde Led Zeppelin hasta The Who pasando por Pink Floyd. Pero por encima de todas, un nombre: Jimi Hendrix. Jason Barwick (voz y guitarra) en una reciente entrevista añadía las de otros grandes guitarristas como Steve Ray Vaughan, Gary Moore y Mark Knopfler. Y es que este jovencísimo chico de tan sólo 21 años, ha recogido todo lo bueno de estos monstruos del rock. Las 2 horas que duró el concierto fueron un auténtico despliegue de sus cualidades con las 6 cuerdas. Además de tocar, no paró de saltar y brincar, clavando todas las notas y sin ningún fallo, algo dificíl si a los movimientos por el escenario le añadimos la obligación de cantar en la mayoría de canciones. En esta tarea le ayuda Tim Smith (voz y bajo) que es padre del batería, Kurtis Smith (22 años), otro portento desde la sala de máquinas que nos deleitó con un solo de batería (quizá un tanto largo) en el que acabó tocándola con las manos. Pura energía juvenil.

Una crítica recogida en su web dice que es como ver a Jimi Hendrix, John Bonham y Roger Waters en la misma habitación. Y es que resulta inevitable no recordarles al oir los guitarrazos de Jason o los mamporros de Kurtis. Además del repertorio de su cosecha discográfica, hasta el momento tienen 3 discos y un EP, hicieron dos versiones de Hendrix (Little Wing y Voodoo Chile), así como partes del Dazed And Confused zeppeliano y del Astronomy Domine de Pink Floyd de Syd Barrett. Este último interpretado por Jason con un arco de violín sustituyendo a la tradicional púa. Un detalle más de su precoz virtuosismo. Toda esta buena impresión que me causaron parecía que no era desconocida para las casi 500 personas que se congregaron allí. La fama que les precedía y que ahora he descubierto por la red no es infundada. Fueron nombrados como mejor grupo británico del año por la revista It’s Only Rock & Roll. Precisamente en un momento de la noche Jason se dirigió a los allí presentes diciendo que Bilbao era una «rock & roll city». Sí, y que The Brew se encargó de poner la electricidad necesaria para iluminarla aquella noche. Un brillo esperanzador para una banda que va a dar mucho que hablar en los próximos años.

Os dejo con diferentes videos para que comprobéis su manera de comportarse encima de un escenario. Si no les habéis visto todavía, no os los perdáis la próxima vez que pasen por aquí, no saldréis defraudados. Las espléndidas fotos que ilustran esta crónica las sacamos de esta web y de last.fm.

Así abrieron en Bilbao con Every Gig Has A Neighbour de su último disco A Million Dead Stars.

La misma canción con más calidad en un concierto televisado en Alemania donde tienen muchos fans (Rockpalast 25-07-2009).

Maybe This Time de la misma retransmisión.

A continuación Change In The Air en Zaragoza, más cerca de ellos imposible.

Jason tocando con el arco y el solo de batería de Kurtis.

Y terminamos con una gran cover de Voodoo Chile en el Rockpalast.

Comfortably Numb. Pink Floyd Vs Scissors Sisters


En nuestra particular batalla a la que sometemos una canción original y sus versiones, os traemos hoy un enfrentamiento entre grupos totalmente antagónicos en sus propuestas musicales. Si bien Pink Floyd son conocidos por todos como los precursores y maestros del rock psicodélico, los Scissor Sisters (término para referirse en el argot a las lesbianas) abordan un glam rayando el petardeo.

Tal vez a algunos el mero hecho de la comparación les pueda resultar ofensiva pero os avisamos que tanto a David Gilmour, Nick Mason como a Roger Waters no les desagradó en absoluto sino más bien todo lo contrario.

Comfortably Numb se publicó en el admirado y grandioso The Wall en 1979 y fue escrita por el tándem compositivo Gilmour-Waters. El solo de guitarra de Gilmour está considerado como uno de sus mejores solos y según la revista Guitar World entre los 4 primeros de la historia.

Aquí la versión que aparece en The Wall:

Una actuación correspondiente a su directo Pulse en Londres en 1994.

La versión estaba incluída en el debut discográfico de Scissor Sisters en el 2004 que vendió, sólo en Europa, 3 millones de copias, llegando al número 1 en las listas. El cover por su parte alcanzó el número 10 en Inglaterra, lo que supuso el primer gran éxito de los newyorkinos. El falsete de su cantante Jake Shears es uno de los puntos fuertes, consiguiendo este resultado orientado a las pistas de baile, algo totalmente alejado del concepto inicial de los Pink Floyd.

Y en directo en el festival germano Rockpalast

Rock Bottom. La superación de la adversidad de Robert Wyatt


Si alguien cree en el aforismo de Nietzsche lo que no te mata, te hace más fuerte este es nuestro protagonista de hoy. Robert Wyatt, un músico inglés de rock progresivo procedente de la llamada escena de Canterbury, se encontró un buen día con la fatalidad pero consiguió reponerse a ella con entereza sacando un disco terapeútico rodeándose de reputados amigos.

En 1966 Wyatt empezó su andadura musical formando el grupo Soft Machine, uno de los pioneros del rock progresivo que debía su nombre al libro del mismo título escrito por el Beat William S. Burroughs. Permaneció durante 5 años con ellos hasta que las clásicas diferencias artísticas le llevaron a abandonarlos y crear su propio proyecto, Matching Mole. En ambos grupos se encargaba de la batería y de las voces, esto último algo inusual entre los bateristas. Cuando estaba preparando el que iba a ser su tercer disco, ocurrió algo que lo cambiaría todo para siempre.

El 1 de julio de 1973, Wyatt empinó el codo más de la cuenta en una fiesta y se cayó desde un cuarto piso al vacío. Esquivó la muerte pero pagaría un alto precio por ello, sufrió paraplejia en las dos piernas. Este accidente tan traumático le supuso un problema de movilidad pero no consiguió apartarle de su pasión por la música.

Wyatt y Benge en 1974

Postrado en la cama del hospital donde estuvo convaleciente, decidió abandonar la idea del disco con Matching Mole y dedicarse por completo al suyo en solitario. Allí, rumiendo su desgracia, empezó a dar forma a las canciones. El material elaborado en ese ambiente enfermizo no pudo ser más intimista y desgarrador. Su tono depresivo, aunque profundamente personal, no convenció a Wyatt y lo desehechó todo. Prevaleció el trabajo que había hecho en Venecia antes del fatal accidente, aprovechando que su pareja, la pintora Alfreda Benge, estuvo trabajando como ayudante del director de la película Amenaza en la Sombra (Donald Sutherland y Julie Christie).

Portada original

Con la ayuda de amigos de la talla de Mike Oldfield, Fred Frith, Ivor Cutler o Nick Manson (batería de Pink Floyd), éste último en las labores de productor, dio forma a unas canciones con influencias jazzísticas y de rock progresivo. La portada consistió en un dibujo pintado por Alfreda, con la que se casaría justo el mismo día de la publicación de Rock Bottom.

Portada reedición 1998

Consciente de que su música no era la más accesible para un público masivo, Wyatt grabó una versión del I’m Believer de los Monkees y la editó como single para promocionar el álbum. La acogida por parte del público no pudo ser mejor, entrando en el top 30 de las listas británicas.

Su primera aparición pública después de su percance estuvo a punto de no producirse. Aunque parezca increíble, la BBC no quería emitirlo porque salía en silla de ruedas. Al final se salió con la suya y apareció en el escenario con una banda de lujo formada por Andy Summers (Police) en la guitarra acústica, Nick Manson (Pink Floyd) batería y Fred Frithen en la guitarra eléctrica.

Para acabar, en Little Red Riding Hood Hit the Road participa el músico Mike Oldfield.

5 canciones en la vida de…Borja Urresti (Eightman)


Hoy la colaboración de la semana viene de la mano de un miembro de una joven formación de la que ya hemos hablado aquí en varias ocasiones y que está causando una buenísima impresión con su debut discográfico Louder. Se llaman Eightman y él es Borja Urresti su cantante, guitarrista y principal compositor.

La lista de las canciones confeccionada por Borja, como comprobaréis más adelante, es bastante ecléctica. Desde la psicodelia de The Verve o Pink Floyd, al talento atormentado de Nick Drake, para finalizar con 2 de los grupos más en boga en los últimos años como son Wilco y Arcade Fire. Borja nos cuenta las sensaciones que le producen cada una de ellas, dejándonos pistas de por dónde van sus gustos musicales. Nuestro agradecimiento a él por la predisposición que ha mostrado en participar y aunque sabemos que es complicado quedarse con tan sólo 5, os animamos a todos vosotros a que os estrujéis el cerebro para seleccionar las canciones de vuestra vida.

The Verve «Blue»: una vez leí que tras haber hecho esta canción podrían haberse retirado y estoy de acuerdo, si no fuera porque entonces no habrían hecho Urban Hymns. La psicodelia indie de Ashcroft-McCabe siempre me ha atraído, una pena los rollos que han habido entre ellos, me quedé sin verles en el Doctor Music del 98 debido a su primera separación «oficial» y todavía hoy siguen peleados, una pena.

El video oficial no permite la inserción en el blog, os dejamos con su enlace. Para completarlo una actuación en Chicago del 93. Un lugar con el que el protagonista de hoy tiene un fuerte vínculo ya que estuvo viviendo allí durante unos años.

Pink Floyd «Comfortably numb»: muchísimo talento tanto en los inicios con Syd Barrett como en su etapa posterior, con Syd sobrevolando muchos de sus temas. Geniales y The Wall una gran película que de pequeño me produjo alguna que otra pesadilla.

24 años después Roger Waters volvía a subirse a un escenario con sus antiguos compañeros. Esto sucedió el 2 de Julio del 2005 con motivo del Live 8, un macroconcierto solidario.

Nick Drake «Hazey Jane II»: la he escuchado mil y una veces y no me canso. Toda la pureza la encuentro en su música y letras.

Wilco «Jesus, etc.»: los conocí cuando vivía en Chicago y me traen muchos recuerdos de mi estancia allí. Lo curioso es que los ví por primera vez en el Euskalduna de Bilbao, con Smile redondeando el plan. Recomendable además la película «I am trying to break your Heart: A film about Wilco».

Y ya que le recuerda a su estancia en Chicago, este video es de una actuación en el festival Lollapalooza que se celebra en la misma ciudad.

Arcade Fire «Wake up»: su directo es increíble, ya sólo por escucharlo merece la pena ir a verles, si además esto se hace en un festival y en verano puede ser apoteósico.

Uno de los festivales veraniegos por excelencia es el de Glastonbury. Os dejamos con esta extraordinaria interpretación de los canadienses del 22 de junio del 2007.

Pink Floyd. Entre ruinas romanas.


Nuestro sección recién nacida de Escenarios Singulares tiene hoy una ubicación completamente distinta a la del primer capítulo. Si nos fuímos con Johnny Cash de tourné por diferentes cárceles, esta vez nos trasladamos (por sugerencia de Bruno Pekin) a un lugar con mucha historia, nada menos que a la antigua Pompeya. El anfiteatro de la ciudad romana, engullida por la erupción del Vesubio, fue el sitio elegido por  Pink Floyd para grabar un video en directo llamado Live at Pompeii (1972).

Un film que lo de LIVE habría que matizar ya que no hubo público. Además, 3 de las canciones las grabaron en el anfiteatro en ruinas entre el 4 y el 7 de octubre. El resto lo hicieron en un estudio de París con proyecciones del citado anfiteatro. Aunque realmente tenemos un concierto sin audiencia y parte tocado entre cuatro paredes, el balance final es un trabajo que refleja el principio del camino de la psicodelia al rock progresivo que Pink Floyd había comenzado a recorrer. Una evolución de la que ya no participaba entonces Syd Barrett debido a sus problemas mentales derivados del abuso del LSD.

Anfiteatro de Pompeya

A la edición de 1972 le siguió otra de 1974 que añadía imágenes de la grabación de su famoso álbum Dark Side Of The Moon en los míticos estudios de Abbey Road. Finalmente en el 2003 se publicó la «Director’s Cut» que incluía como novedad imágenes hechas por ordenador del espacio y de Pompeya, y alguna entrevista más.

Los preparativos de Pink Floyd en Pompeya

Pompeya fue descubierta en 1748. Se pensaba que se había perdido para siempre pero no fue así afortunadamente. Se encontraba debajo de las gruesas capas de ceniza que la cubrían. Es además la única ciudad antigua de la que se conoce su estructura topográfica, estando distribuída de forma regular a pesar de la irregularidad del terreno. Pink Floyd la eligió para este proyecto novedoso en aquellos años y este fue el resultado. A continuación tenéis 3 videos de diferentes pasajes de este directo, que no lo es tanto, en una localización repleta de historia.