Las anécdotas hispanas de Joe Strummer (IX)


Seguimos con las anécdotas de Joe Strummer que como veis dan para muchos capítulos, ya vamos por el noveno. Una vez más lo que cuenta Jesús Arias, su amigo de Granada, tampoco tiene desperdicio. La composición de una canción puede surgir por múltiples causas pero parece increíble que lo siguiente le sucediera al bueno de Joe:

«Cuento un ‘secretillo’ de Joe. Me lo ‘confesó’ en plan «no se lo digas a nadie… aunque sé que, tarde o temprano, me descubrirán».

Se trata de la canción «Trash City». Escribo a bote pronto, de memoria, y creo que la banda de Joe de entonces, que a mí me dio siempre mala espina, era The Rockabilly Boys o algo así. Tengo el maxi-single con la famosa pegatina redonda que Joe llevaba en su Telecaster. En la portada, Joe está en Times Square alzando sus brazos hacia el cielo. La dedicatoria es bastante divertida. Por aquellos días, en unas maniobras militares sobre Granada, un avión militar que abastecía de fuel a otro, perdió la manguera en el aire, y cayó cerca de los almacenes de Hipercor. No hubo víctimas y nadie resultó herido, pero cuando se lo conté a Joe, se partía de risa. La dedicatoria del «Trash City» (el disco lo tiene ahora mi hermano Antonio y lo que digo lo digo de memoria) era más o menos: «Joe Strummer mirando al cielo esperando que no le caiga una manguera de fuel en HIPER-COOR». Algo así.

Entonces me contó su secretillo. Una noche, mientras tocaba la guitarra, a Joe se le ocurrió una melodía magnífica. Volvió a tocarla y le pareció buenísima. Tocaba y tocaba la guitarra y la canción iba creciendo. Estaba orgullosísimo. Al día siguiente, apareció en el ensayo y le tocó la canción al resto del grupo. Todos dijeron que podía ser un «hit». Se pusieron a trabajar concienzudamente en la canción. Se metieron en el estudio. La grabaron. Joe estaba superfeliz. ¡Tenía, después de tantos años, una canción de la hostia! Un single perfecto.

Terminaron las sesiones de grabación, mezclaron, mandaron el máster para la remasterización y la impresión. Joe pidió una cinta para escucharla en casa.

Se la puso a Gaby, su mujer, y a Gaby le encantó, según me contaba Joe. Joe estaba entusiasmado hasta que Jazzy, su hija, apareció en el salón: «Daddy, are you playing now my school songs?» («Papá, ¿ahora te dedicas a tocar mis canciones de colegio?»).

Efectivamente, «Trash City», para los que tengáis esa canción, es una famosa canción para niños en los colegios ingleses, de las que terminan en plan: «Doo-Da-Run». Joe, sin darse cuenta, había plagiado una canción escolar y la había convertido en una canción rock y era porque, en esa época, Jazzy estaba todo el día canturreando la canción por toda la casa…

Hasta hoy, nadie ha demandado a Joe Strummer por «Trash City».

Aquí la canción que la hija de Joe descubrió que no era original de su padre.

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